El Ministerio de Energía y Minas presentó un paquete de propuestas al Congreso con el objetivo de actualizar la Ley de MAPE, incorporando trazabilidad, incentivos tributarios y herramientas de gestión ambiental.
El Ministerio de Energía y Minas (MINEM) ha remitido a la Comisión de Energía y Minas del Congreso un informe técnico con quince recomendaciones orientadas a mejorar el marco normativo que regula la Pequeña Minería y Minería Artesanal (MAPE). El documento es resultado de un proceso de diálogo multisectorial, donde se recogieron aportes de asociaciones de pequeños mineros, universidades, entidades del Estado y organizaciones civiles. La intención es generar una norma más adecuada a la realidad del sector, que contribuya tanto a la formalización como a la sostenibilidad de estas actividades.
Entre las recomendaciones se incluyen propuestas concretas como el desarrollo de un nuevo marco para la trazabilidad de los minerales, beneficios tributarios adaptados a la escala de operación de los pequeños mineros, y medidas que faciliten su inclusión en el sistema financiero. También se plantea la promoción de mecanismos para la comercialización de oro de origen legal, así como un régimen simplificado para agilizar los trámites vinculados al inicio o reinicio de actividades extractivas. Por otro lado, se sugiere adaptar los instrumentos de gestión ambiental a la realidad de esta escala de producción.
El informe también sugiere cambios estructurales como establecer zonas especiales para concesiones de pequeña minería, otorgar preferencia a los mineros formales en ciertas áreas, mejorar la normativa sobre minería aluvial y autorizar el uso controlado de explosivos. Una de las propuestas más destacadas es la creación de una Dirección General para la MAPE dentro del MINEM, lo cual permitiría un abordaje más técnico y específico para este segmento. Con estos ajustes, el sector busca consolidar un modelo de minería artesanal más responsable y eficiente, que no quede fuera del desarrollo nacional.