Petroperú se encuentra en una encrucijada. Mientras la empresa estatal enfrenta una crisis directiva marcada por la ausencia de un directorio desde hace más de un mes, sus trabajadores amenazan con una huelga indefinida si el gobierno no toma medidas al respecto.
En un comunicado oficial, Petroperú reafirmó su respeto por las organizaciones sindicales y por los derechos laborales de sus trabajadores. La empresa exhortó a que cualquier medida de protesta se mantenga dentro de los marcos legales y relacionados exclusivamente con temas laborales inherentes a la compañía. “Invocamos a los trabajadores a continuar laborando por la empresa, considerando la importancia de mantener el abastecimiento de combustibles y contribuir a la recuperación económica del país”, expresó la estatal en su comunicado.
Los sindicatos de Petroperú exigen la inmediata designación de un nuevo directorio, argumentando que la falta de liderazgo está poniendo en riesgo la sostenibilidad de la empresa. Además, reclaman el pago de deudas que el Estado mantiene con Petroperú, como el fondo de estabilización y el IGV de la selva. Luis Camino, coordinador general de la Coalición Nacional de Sindicatos de Petroperú, ha señalado que más de 1,000 trabajadores se unirían a un eventual paro nacional de 48 horas, previo a una huelga indefinida si sus demandas no son atendidas.
Camino señaló que el Estado adeuda a Petroperú más de S/ 16,000 millones por diversos conceptos, entre ellos el Fondo de Estabilización de Combustibles, el IGV de la selva y seguros relacionados con sabotajes en el Oleoducto Norperuano. Según el sindicato, la falta de respuesta a estas deudas, sumada a la ineficiencia en la designación de un nuevo Directorio, ha generado desconfianza en la gestión gubernamental de la empresa estatal.
El gobierno aún no se ha pronunciado oficialmente sobre las demandas de los trabajadores de Petroperú. Sin embargo, es de esperar que en los próximos días se tomen medidas para solucionar esta crisis y evitar una paralización que podría tener un impacto negativo en la economía del país.