El distrito de Atico, en la región Arequipa, atraviesa una situación crítica por la irrupción de redes ilegales que buscan apoderarse de socavones ya en proceso de formalización, replicando el escenario violento vivido en Pataz.
En el sur del país, el distrito de Atico (provincia de Caravelí) se encuentra en medio de un escenario de creciente hostilidad relacionado con la actividad minera ilegal. Las organizaciones Calpa Renace y Atico Calpa, ambas inscritas en el Registro Integral de Formalización Minera (Reinfo), han denunciado múltiples actos de violencia y amenazas por parte de presuntos mineros ilegales que intentan tomar el control de las zonas donde ellos operan legalmente. El caso ha encendido las alertas, debido a sus similitudes con lo ocurrido hace poco en Pataz, región La Libertad, donde una masacre cobró la vida de 13 personas.
De acuerdo con los testimonios de los representantes de estas bases mineras, los grupos ilegales están actuando de forma organizada y violenta: han incendiado vehículos, acosado a trabajadores y atacado la infraestructura minera para intimidar. Cristian Laura López, dirigente de Calpa Renace, señaló que estas mafias buscan apropiarse de sus inversiones sin haber cumplido con ningún proceso formal ni legal.
Frente a este panorama, el alcalde de Atico, Julio Candia, ha pedido que el Gobierno declare estado de emergencia en el distrito. No obstante, los propios mineros formales muestran preocupación ante esa posibilidad, ya que temen que, como sucedió en Pataz, las operaciones legales queden paralizadas, favoreciendo indirectamente a empresas más grandes y dejando vulnerables a quienes sí están dentro del marco legal.