En el marco del Foro de Cooperación Económica del Asia-Pacífico (APEC), los ministros de Energía de las 21 economías miembros (Estados Unidos, China, Australia, Brunei Darussalam, Canadá, Corea, Filipinas, Hong Kong, Indonesia, Japón, entre otras.) alcanzaron un importante consenso en Perú, culminando con la firma de la Declaración de Lima. Este acuerdo establece directrices para asegurar una transición energética que sea justa, limpia y sostenible, y también aboga por la implementación de hojas de ruta para el desarrollo del hidrógeno limpio y de bajo carbono en la región Asia-Pacífico. El ministro de Energía y Minas, Rómulo Mucho, destacó que, tras nueve años, se ha logrado esta significativa unanimidad entre los miembros, subrayando el compromiso compartido con la cooperación internacional para responder a las crecientes demandas energéticas.
El 15 y 16 agosto, el ministro presidió la 14° Reunión Ministerial de Energía de APEC, donde tuvo la oportunidad de establecer directrices de la propuesta peruana para el uso del hidrógeno bajo en carbono, lo cual es un hito en la historia del foro. Este tipo de energía es clave para descarbonizar sectores cruciales como la industria y el transporte, lo que refuerza la importancia de asegurar un suministro energético sostenible para el desarrollo económico y social global. Durante su intervención, subrayó que alcanzar la neutralidad de carbono es esencial para enfrentar los desafíos climáticos, destacando que la innovación en energías renovables puede reducir los costos globales de la generación energética.
Por último, el ministro de Energía y Minas enfatizó que la transición energética debe adaptarse a las particularidades geográficas e industriales de las economías de APEC. Así mismo, invitó a los miembros a compartir sus mejores prácticas para lograr una economía justa e inclusiva, acelerando así la descarbonización global. También resaltó la importancia de la electrificación rural en Perú, la cual transforma la vida en las comunidades más remotas y menos favorecidas del país. Finalmente, elogió el enfoque voluntario y no vinculante de APEC, que fomenta la armonía y la cooperación entre sus economías miembros, lo que fortalece el foro como un espacio de consenso y acción conjunta.
