El sur y norte del país fortalecen su papel estratégico en el crecimiento económico gracias al empuje de la industria extractiva
Entre enero y mayo de 2025, cuatro regiones del país se posicionaron a la cabeza de la inversión minera, acumulando el 48.5% del total nacional, según el último Boletín Estadístico Minero (BEM) del Ministerio de Energía y Minas. Este avance confirma el papel decisivo de Moquegua, Arequipa, Áncash y Apurímac en el desarrollo económico del Perú.
Moquegua volvió a colocarse en el primer lugar con una inversión de 276 millones de dólares, gracias a la presencia de grandes operadores como Anglo American Quellaveco, Buenaventura y Southern Peru Copper Corporation, que desarrollan importantes proyectos extractivos en la región.
Arequipa ocupó la segunda posición con 220 millones de dólares, y un aumento del 20.2% frente al mismo periodo del año anterior. El impulso vino principalmente de Minera Zafranal S.A.C., que continúa ampliando sus operaciones en el proyecto “CMZ 3”.
En tanto, Áncash recibió 199 millones de dólares en inversiones, mientras que Apurímac, con 198 millones, logró el mayor crecimiento interanual entre las cuatro regiones, con un impresionante 45.5%. Esta última cifra responde a los avances de Southern Peru en concesiones clave como “Chanca 5”, “Chanca 6” y “Chanca 7”.
Los datos revelan una tendencia clara: las regiones mineras no solo atraen capital privado, sino que también impulsan empleo, infraestructura y desarrollo local. La consolidación de estas zonas como polos de inversión confirma el rol central del sector minero en el impulso económico del país.