La Asociación Automotriz del Perú (AAP) subraya los beneficios económicos y ambientales del Gas Natural Vehicular (GNV), pero advierte que su crecimiento sostenido requiere una política pública integral y articulada.
La Asociación Automotriz del Perú (AAP) ha resaltado el significativo potencial del Gas Natural Vehicular (GNV) en el país, destacando sus beneficios económicos y ambientales. Sin embargo, el gremio advierte que, para lograr una masificación efectiva, es indispensable que el Estado implemente una estrategia clara y coordinada que involucre al sector privado y promueva inversiones en infraestructura y tecnología.
Según datos de la AAP, al cierre del primer semestre de 2024, el parque automotor a GNV alcanzó las 325,676 unidades, representando un incremento del 10.6% respecto al mismo periodo del año anterior. Además, se estima que los usuarios de GNV han obtenido ahorros por un total de S/ 1,443 millones durante los primeros seis meses del 2024, al optar por este combustible en lugar de los derivados del petróleo. Desde su introducción en el mercado peruano, los ahorros acumulados suman S/ 25,226 millones, beneficiando directamente a los propietarios de vehículos a gas natural y aumentando su capacidad adquisitiva.
No obstante, la AAP señala que el ritmo de conversiones de vehículos a GNV registró una contracción durante el primer semestre de 2024 en comparación con el mismo periodo del año pasado. Esta disminución se atribuye a la falta de políticas públicas integrales y eficientes que incentiven la conversión y/o transformación de la matriz energética vehicular hacia una más responsable con el medio ambiente.
El gremio automotor enfatiza que el Perú cuenta con considerables reservas probadas de gas natural, lo que asegura su abastecimiento. Si se logra masificar la distribución de este hidrocarburo, se reduciría la dependencia de los combustibles derivados del petróleo, evitando la exposición a las fluctuaciones en las cotizaciones internacionales del crudo.
Para la AAP, es primordial que el Estado asuma un rol protagónico y más activo en la masificación del gas natural, a través de una estrategia articulada que involucre la participación del sector privado. Esto incluye brindar los incentivos necesarios para que, mediante mecanismos de inversión público-privado y una adecuada regulación y fiscalización, se asegure el cumplimiento de los compromisos asumidos.
Entre las acciones propuestas por la AAP se encuentran la promoción del uso del GNV en flotas estatales y de transporte público, la expansión de la red de estaciones de carga y la implementación de programas de financiamiento para la conversión de vehículos. Estas medidas contribuirían a mejorar la calidad del aire, reducir las emisiones de gases contaminantes y generar ahorros significativos para los usuarios.
En conclusión, la AAP insta al gobierno a establecer una política pública clara y coherente que permita aprovechar al máximo el potencial del GNV, beneficiando tanto a la economía nacional como al medio ambiente.