El banco suizo anticipa que el oro alcanzará este valor en junio, impulsado por la incertidumbre económica y las tensiones comerciales globales.
La volatilidad de los mercados y las crecientes disputas comerciales han llevado a UBS Group a ajustar su previsión del oro al alza. El metal precioso, que ya superó los US$ 3,000 por onza antes de lo esperado, se fortalecerá aún más en los próximos meses debido a la incertidumbre financiera y a nuevos riesgos geopolíticos.
El oro continúa consolidándose como un activo refugio en tiempos de inestabilidad económica. UBS Group ha revisado su proyección y ahora espera que el metal precioso alcance los US$ 3,200 la onza, una cifra que podría materializarse en junio de este año. Esta previsión llega en un contexto de alta volatilidad financiera y conflictos comerciales en aumento.
El repunte del oro ya había llevado a la entidad financiera a prever un techo de US$ 3,000 por onza, cifra que se alcanzó antes de lo esperado. Sin embargo, nuevos factores geopolíticos han impulsado aún más el atractivo del metal.
Uno de los principales catalizadores de esta escalada es el plan del presidente estadounidense Donald Trump de imponer nuevos aranceles recíprocos, lo que podría intensificar las tensiones comerciales y aumentar la aversión al riesgo entre los inversores. Ante este panorama, el oro se fortalece como reserva de valor, atrayendo a quienes buscan proteger su capital en medio de la incertidumbre.
UBS no es el único que proyecta un alza en el precio del oro. Diversos analistas coinciden en que la creciente demanda de activos seguros, junto con la posible flexibilización monetaria en algunas economías clave, podría seguir impulsando el valor del lingote en los próximos meses.
En este contexto, el mercado estará atento a las próximas decisiones de política económica y a la evolución de los conflictos comerciales globales, factores que influirán en la trayectoria del oro en el corto y mediano plazo.
