El metal precioso alcanza un máximo histórico impulsado por la incertidumbre económica, la demanda de los bancos centrales y las expectativas de recortes en las tasas de interés.
El precio del oro superó este viernes, por primera vez en la historia, la marca de los 3.000 dólares por onza, impulsado por la incertidumbre en los mercados financieros debido a las tensiones comerciales generadas por la administración del expresidente Donald Trump.
Durante la jornada, el oro al contado alcanzó un máximo de 3.004,86 dólares antes de retroceder ligeramente a 2.981,42 dólares a las 15:34 GMT, debido a tomas de ganancias. Por su parte, los futuros del oro en Estados Unidos se mantuvieron estables en torno a los 2.991,9 dólares.
Según el analista Tai Wong, los inversionistas han recurrido al oro como un refugio seguro en medio del nerviosismo bursátil provocado por las políticas arancelarias de Trump. En lo que va del año, el metal precioso ha registrado un aumento cercano al 14%, reflejando el temor por los efectos económicos de estas medidas y su impacto en los mercados globales.
Además de la incertidumbre financiera, la fuerte demanda de los bancos centrales ha impulsado aún más el precio del oro, con China liderando las compras por cuarto mes consecutivo. A esto se suma la expectativa de una política monetaria más flexible por parte de la Reserva Federal, lo que ha favorecido al metal dorado frente a otros activos.
En cuanto a otros metales preciosos, la plata cayó un 0,7% hasta los 33,56 dólares por onza, mientras que el platino bajó un 0,6%, situándose en 988,4 dólares. Por el contrario, el paladio registró un alza del 1,1% y alcanzó los 968,36 dólares.
