La formalización de los mineros en diversas regiones impulsa la seguridad, facilita el acceso al crédito, promueve el uso de tecnologías limpias y fortalece proyectos sostenibles que aportan al desarrollo de sus comunidades.
Mineros artesanales y pequeños productores de diversas regiones del país resaltaron las ventajas de la formalización, entre ellos, la posibilidad de obtener financiamiento, seguridad jurídica, mejores condiciones de seguridad y salud ocupacional, la reducción del daño ambiental y su integración a la cadena de valor de la minería formal.
En Huepetuhe, ubicado en la provincia de Manu (Madre de Dios), Julio Valencia explicó que utilizan tecnologías limpias para la extracción de oro, evitando el uso de reactivos y sustancias químicas.
Por otro lado, mineros formalizados de San Miguel de Untuca (Puno), indican que aportan activamente al desarrollo de sus comunidades mediante proyectos agrícolas, ganaderos y educativos. Además de operar cumpliendo los estándares de seguridad y salud en el trabajo.
También señalaron que al haber regularizado su situación , pueden comercializar sus productos sin restricciones, respetando el medio ambiente y ajustándose a la normativa vigente. Asimismo, manifestaron que este proceso ha facilitado la inclusión de mujeres en labores operativas, superando las brechas de género.
Por su parte, en el distrito de Sapillica (Piura), los pequeños productores mineros formalizados promueven el proyecto agrominero y ecoturístico Caña Brava, que fomenta la recirculación del agua para un uso adecuado de los recursos hídricos. Esta iniciativa también contribuye a la reforestación para el cultivo de árboles maderables como el ciprés, pino y eucalipto, evidenciando que minería y agricultura pueden coexistir de manera sostenible.
En Ayacucho, los mineros de la empresa San Luis II S.A. destacaron que la formalización les ha permitido comercializar sus minerales con transparencia y adquirir explosivos e insumos, cumpliendo lo establecido en la ley.
El Ministerio de Energía y Minas (MINEM)reitera su compromiso de promover la formalización de la pequeña minería, un proceso que permitirá aumentar la recaudación de impuestos, promover un n crecimiento económico sostenible y reducir los riesgos ambientales y sociales relacionados a la actividad ilegal.
