- Un estudio de Consumer Truth, revela cómo las familias emergentes del país asocian el progreso con logros tangibles en la vivienda.
- El estudio reveló que, para los segmentos C y D, el verdadero progreso se asocia a logros como construir un segundo piso, ampliar la vivienda o levantar un nuevo cuarto.
Para el 79% de peruanos de nivel socio económico C y D, tener una vivienda es sinónimo de progreso y logro, según un estudio elaborado por Consumer Truth. Del total, el 58% considera que poseer un inmueble es un logro personal y familiar (proyecto de vida); y para el 21%, es un lugar para que sus hijos se desarrollen.
“En el Perú, la vivienda es más que un espacio físico: es un símbolo de logro y estabilidad. Los habitantes construyen su hogar y futuro, creando un ambiente para el crecimiento de sus hijos, donde 8 de cada 10 peruanos ven la vivienda como una meta familiar”, señala el informe.
El estudio reveló que, para los segmentos C y D, el verdadero progreso se asocia a logros materializados como construir un segundo piso, ampliar la vivienda o levantar un nuevo cuarto. En ese recorrido, el pintado del hogar no se percibe como un hito estructural, pero sí como un gesto que realza esos avances y permite mostrar con orgullo el esfuerzo de la familia. “Cada muestra de crecimiento merece ser celebrado, y el pintado es una forma de hacerlo con orgullo”, señala Antonella Baro, Jefa de Marca de Fast, de Qroma.
¿Qué efecto tiene la pintura en las familias peruanas?
En nuestro país, la pintura juega un rol importante y el color tiene un poder transformador. Entre sus principales impactos destacan:
- Refuerza la identidad familiar: cada color elegido refleja la personalidad y aspiraciones de quienes habitan la casa.
- Genera orgullo y pertenencia: una fachada cuidada y colorida comunica progreso y respeto por el hogar.
- Contribuye a la integración comunitaria: las casas pintadas incentivan el cuidado del barrio y uso de los espacios comunitarios, fomentando sentido de pertenencia colectiva y compromiso con su comunidad, en paralelo, fomentan un sentido colectivo de mejora.
Asimismo, la pintura protege las paredes de manchas y polvo, genera una mejor iluminación y confort de los espacios, funciona como una barrera contra agentes externos que pueden debilitar la estructura, y aumenta el valor de reventa o alquiler de los inmuebles.
