La petrolera estatal aún no restablece sus líneas de crédito y cerrará el 2025 con pérdidas, pero confía en recuperarse mediante exportaciones y mayor eficiencia operativa.
Petroperú enfrenta un déficit de capital de trabajo de US$ 1,000 millones y continúa sin acceso a financiamiento bancario. Sin embargo, su presidente, Alejandro Narváez, aseguró que no solicitarán un nuevo rescate estatal y que, a partir del 2026, la empresa volvería a tener resultados positivos.
En una presentación realizada en la sede institucional, Narváez señaló que se prevé una pérdida neta de US$ 223 millones al cierre del 2025, pese a que se espera alcanzar un ebitda de US$ 270 millones ese mismo año. Los resultados de este primer semestre han sido «mediocres», en parte por el cierre de puertos debido a fenómenos naturales, lo que ocasionó un gasto no previsto de US$ 15 millones por sobreestadía de buques.
Actualmente, Petroperú no ha logrado restablecer sus líneas de crédito perdidas en 2022. No obstante, busca acceder a financiamiento de corto plazo a través de la banca privada, entidades financieras y financistas. Según Narváez, “no hemos pedido ni vamos a requerir un nuevo rescate del lado estatal”.
Además, la petrolera estatal debe asumir un gasto de US$ 120 millones para el mantenimiento del Oleoducto Nor Peruano (ONP), pese a que el Decreto de Urgencia N° 013, emitido en septiembre de 2024, encargó al Ministerio de Energía y Minas establecer medidas para mejorar su eficiencia con cargo a su presupuesto.
Petroperú proyecta cerrar el 2026 con una ganancia neta, gracias a una mayor participación de mercado, exportaciones a Brasil, Bolivia y Ecuador, y la operación plena de la nueva refinería de Talara. Dicha planta, que comenzó a funcionar en diciembre de 2023, ha enfrentado diversas paradas que aún se investigan mediante una auditoría forense, cuya buena pro se otorgará el próximo 6 de agosto.
La compañía estima alcanzar un ebitda de US$ 614 millones y una utilidad neta de US$ 103 millones en 2026. Para el 2028, espera ingresos por US$ 114 millones y un incremento en su cuota de mercado del 25% actual al 30% al finalizar este año, con una meta del 35% para el 2030.