La administración Trump acelera permisos y promueve inversiones en uranio, destacando iniciativas como las de Laramide Resources y Energy Fuels para fortalecer la producción nacional.
Estados Unidos está intensificando sus esfuerzos para revitalizar la industria del uranio, considerada estratégica para la seguridad energética y nacional. La administración del presidente Donald Trump ha implementado medidas para acelerar proyectos clave y fomentar la inversión en el sector.
Laramide Resources ha obtenido la cobertura FAST-41 para dos de sus proyectos de uranio en el oeste de EE. UU., lo que agiliza los procesos de revisión ambiental y permisos federales. Esta designación subraya la importancia de estos proyectos en la estrategia energética del país.
Por su parte, Energy Fuels Inc. ha anunciado un mes récord de producción en su mina Pinyon Plain en Arizona, extrayendo cerca de 260,000 libras de U₃O₈ en mayo. Además, la empresa está avanzando en proyectos como Bullfrog en Utah y Roca Honda en Nuevo México, respaldados por las recientes órdenes ejecutivas presidenciales que buscan expandir la industria nuclear y de combustibles críticos en EE. UU.
Estas acciones reflejan un compromiso renovado del gobierno estadounidense para reducir la dependencia de importaciones de uranio y fortalecer la producción interna, en un contexto de creciente demanda energética y preocupaciones geopolíticas.