La minera sudafricana Exxaro Resources concretó un acuerdo para adquirir el control mayoritario de dos importantes minas de manganeso en el yacimiento de Kalahari, en la provincia del Cabo Norte, por un valor inicial de 11.670 millones de rands (unos US$640 millones).
Esta operación forma parte de la estrategia de la empresa para ampliar su presencia en minerales críticos, clave para industrias como la fabricación de acero y las baterías para vehículos eléctricos, diversificando así su tradicional enfoque en carbón.
Con esta adquisición, Exxaro pasará a controlar el 60,1% de la mina Tshipi Borwa, la mayor productora de manganeso en Sudáfrica con capacidad anual de 3,5 millones de toneladas, y el 51% de la mina Mokala, actualmente operada en conjunto con Glencore. La transacción podría incrementarse hasta 14.600 millones de rands (cerca de US$740 millones) si se ejercen ciertos derechos adicionales por parte de Glencore, quien mantiene una participación minoritaria en Mokala.
Asimismo, el acuerdo, firmado con los grupos Ntsimbintle Holdings y OM Holdings, otorga a Exxaro acceso a cuatro minas activas en una de las mayores reservas mundiales de manganeso, además de contratos a largo plazo con compradores en mercados estratégicos como China e India, donde la empresa ya tiene presencia con sus exportaciones de carbón.
El CEO de Exxaro, Ben Magara, resaltó que esta operación representa un paso decisivo para posicionar a la compañía en el sector de minerales para la transición energética, sin dejar de lado su compromiso con el carbón como recurso vital para la economía sudafricana. La adquisición está prevista para concretarse a inicios de 2026, fortaleciendo la diversificación y sostenibilidad del portafolio de Exxaro en el contexto global.