Se ha sellado un acuerdo trascendental que otorga a Washington acceso prioritario a proyectos de inversión en minerales críticos ucranianos, como aluminio, grafito, petróleo y gas natural. El pacto, considerado clave en las conversaciones de alto el fuego con Rusia, establece además un fondo de reconstrucción administrado por EEUU para canalizar las ganancias.
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La ministra de Economía ucraniana, Yulia Svyrydenko, confirmó el acuerdo en redes sociales, destacando la creación de un fondo que atraerá inversión global a su país. Por su parte, el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, afirmó que el acuerdo “Muestra claramente a Rusia que la administración Trump está comprometida con un proceso de paz centrado en una Ucrania libre, soberana y próspera a largo plazo”.
Según fuentes de Bloomberg News, el fondo de reconstrucción, administrado por Washington, tiene como objetivo apoyar la recuperación de Ucrania y compensar la futura asistencia militar estadounidense. El presidente Trump declaró en una reunión de gabinete que «llegamos a un acuerdo donde nuestro dinero está seguro, donde podemos empezar a excavar y hacer lo que tenemos que hacer», añadiendo que «también es bueno para ellos porque habrá presencia estadounidense en el lugar… lo que mantendrá alejados a muchos actores maliciosos».
Funcionarios estadounidenses han aclarado que el acuerdo no exige que Ucrania reembolse la ayuda militar recibida, estimada en miles de millones de dólares desde el inicio de la invasión rusa a gran escala. Este pacto se interpreta como una estrategia para garantizar el suministro de minerales críticos para la economía estadounidense y fortalecer la posición de Ucrania en el escenario geopolítico.
El acuerdo entre Estados Unidos y Ucrania representa un movimiento estratégico en el ámbito de los recursos minerales, con implicaciones tanto económicas como geopolíticas. La alianza busca impulsar la inversión en el sector minero ucraniano, asegurar el acceso a materiales críticos para Estados Unidos y respaldar la reconstrucción del país en un contexto de conflicto.