El banco estatal ruso VEB anunció una inversión de más de 1,1 billones de rublos (equivalente a US$ 13.400 millones) para desarrollar la mina de cobre Baimskaya, ubicada en la región de Chukotka, en el extremo oriental de Rusia. Este proyecto, descubierto en 1972, se espera que incremente la producción de cobre del país en un 25% y la de oro en un 4%, según informó Reuters.
La planta de procesamiento de la mina tendrá una capacidad anual de 70 millones de toneladas de mineral. Se estima que la operación generará aproximadamente 6.000 empleos y aportará más de tres billones de rublos en ingresos fiscales.
Georgy Fotin, director general de Baimskaya Management Company LLC, destacó que el proyecto busca establecer un complejo industrial tecnológicamente avanzado que fortalezca la posición de Rusia en el mercado global y promueva el crecimiento económico en el Ártico.
Este desarrollo se alinea con la estrategia del presidente Vladimir Putin de potenciar la región ártica y aumentar el uso de la Ruta Marítima del Norte para el comercio, especialmente hacia los mercados asiáticos, en respuesta a las sanciones occidentales. Se proyecta que el desarrollo de Baimskaya añadirá dos millones de toneladas métricas al tráfico de carga anual a lo largo de esta ruta.
La mina de Baimskaya representa una de las inversiones más significativas en la industria minera rusa en los últimos años, subrayando el compromiso del país con el desarrollo económico sostenible y la expansión de su presencia en el mercado global de minerales.