Expertos del sector minero debatieron sobre los principales retos de la industria en la región, incluyendo la lucha contra la minería ilegal, la equidad de género y la necesidad de inversiones responsables.
Durante un panel moderado por Antonio Silveira, vicepresidente del Sector Privado de CAF, se reunieron destacadas figuras del sector minero latinoamericano. Entre los participantes se encontraban Juan Camilo Nariño, presidente de la Asociación Colombiana de Minería; Joaquín Villarino, presidente ejecutivo del Consejo Minero de Chile; María Eulalia Silva, presidenta de la Cámara de Minería de Ecuador; y Nathalia Gomide, directora de Women in Mining Brasil.
El debate giró en torno a la urgencia de combatir la minería ilegal en América Latina, una problemática que impacta no solo al medio ambiente, sino también a las economías locales y a la gobernanza del sector. Los panelistas coincidieron en que la minería responsable debe ser un compromiso regional, sustentado en regulaciones claras y en la cooperación entre países.
Equidad de género y cambio de percepción
Uno de los aspectos clave de la discusión fue la inclusión de las mujeres en la industria minera. En Brasil, 78 empresas del sector ya han adoptado estrategias activas para fomentar la diversidad y la igualdad de género. Si bien aún persisten brechas significativas, señaló que el compromiso con la equidad ha ido en aumento.
Por su parte, Juan Camilo Nariño enfatizó la importancia de cambiar la percepción negativa que pesa sobre la minería en la región. Es fundamental dejar de verla como una carga y reconocer su potencial para el desarrollo sostenible, siempre que se practique con responsabilidad social y ambiental.
Propuestas para una minería sostenible
Entre las propuestas discutidas durante el evento, se subrayó la necesidad de un financiamiento estratégico destinado a proyectos mineros que cumplan con altos estándares ambientales y sociales. También se resaltó la importancia de fortalecer la cooperación entre países para intercambiar tecnologías y buenas prácticas que fomenten una industria más sostenible.
Asimismo, se planteó la urgencia de implementar políticas que impulsen una mayor participación femenina en el sector minero, promoviendo la equidad de oportunidades.
Otro punto clave fue la modernización de los marcos regulatorios, con el objetivo de atraer inversiones responsables que favorezcan el crecimiento económico y el desarrollo sostenible.
Finalmente, se destacó el papel esencial de las alianzas público-privadas para garantizar una minería sostenible y con beneficios compartidos. América Latina tiene la oportunidad de liderar un modelo minero alineado con la transición energética, siempre que exista una combinación de voluntad política, inversión responsable y una visión común entre gobiernos, empresas y sociedad civil.
