Pedro Gamio, exdirector de Petroperú, advirtió que el reciente rescate financiero otorgado a la petrolera estatal es «oxígeno para un paciente en cuidados intensivos», pero que el problema financiero no se superará si no se implementan las medidas de reestructuración necesarias. Gamio, quien renunció al Directorio de Petroperú el pasado 10 de septiembre, señaló que había alertado al Ejecutivo sobre la insostenibilidad financiera de la empresa, sin obtener respuesta concreta sobre las acciones a tomar.
El especialista destacó la necesidad de revisar profundamente la gestión de la empresa, mencionando que el número de gerencias había aumentado de manera sustancial, mientras que casi 100 trabajadores se acogieron al programa de retiro voluntario. Gamio también señaló que la refinería de Conchán, una planta antigua, debería convertirse en una planta de abastecimiento con apoyo privado. Asimismo, subrayó la inviabilidad de que Petroperú continúe subsidiando el oleoducto, cuyo costo operativo podría alcanzar los US$100 millones anuales, y planteó un mecanismo para que el costo de ese servicio sea cubierto.
«Es fundamental devolverle la cultura corporativa a Petroperú», afirmó Gamio, quien considera que la empresa debe enfocarse en mejorar su eficiencia y transparencia.
El exdirector de Petroperú ha propuesto condicionar la ayuda financiera a la empresa al cumplimiento de metas específicas, con el objetivo de evitar que se repitan situaciones de auxilio económico en el futuro. Según Gamio, esta medida ayudaría a reducir el riesgo país y a mejorar la política fiscal.